Antes de empezar a hablar del proyecto de customización de esta Yamaha SR250, dejadnos que os contemos la historia de esta moto. El dueño de esta motocicleta se la compró cuando era muy joven y la guardó en su garaje con mucho cariño para poder customizarla a su gusto cuando cumpliese 50 años.
Su idea era rememorar aquella época tan bonita cuando conducía esta moto hace más de 25 años. Buscaba una moto elegante y funcional, aunque estaba abierto a sugerencias con la parte estética de la moto. Nos encanta este tipo de clientes que te dejan hacer porque la sorpresa que se llevan al ver la moto terminada vale muchísimo la pena.
Yamaha SR250: Parte delantera
Lo primero fue bajar poco la moto para que fuese fácil de conducir. Le montamos unos fuelles anchos, una llanta de 16 pulgadas y unos neumáticos muy bestias para una moto de estas dimensiones.
Escogimos un manillar con estética Brat Style, relojes analógicos para conseguir ese punto retro que buscábamos y un faro led de última generación para que la visibilidad fuese impecable. También modernizamos el aspecto de esta moto instalando los intermitentes en los puños y optando por mandos minimalistas.
La moto original es una Yamaha SR Especial, por lo que decidimos cambiar el depósito para instalar uno que nos permitiese conseguir unas líneas más rectas. El depósito lleva un trabajo de pintura magnífico, combinando a la perfección la elegancia del negro y el punto más atrevido que nos da el color cobre.
#BOLT64: cuestión de proporciones
La Yamaha SR250 es uno de los modelos que más recomendamos para personas que buscan motos ligeras, fáciles de conducir y muy cómodas para utilizar a diario. Pese a ser una moto más pequeña, sus líneas y proporciones consiguen que tenga mucha presencia. Además, esto se multiplica cuando la customizas y le das una segunda vida.
En cuando al asiento, nuestros amigos de Tapizados Llop han vuelto a dar en el clavo con este tapizado en ante con tratamiento antilluvia y bordados a juego con lo colores del depósito. Al igual ocurre con las tapas laterales, diseñadas e impresas en 3D para asegurarnos de que acoplen y luzcan como queremos.
En cuanto a la mecánica, se ha restaurado el motor completamente. Esta es la única forma de asegurarse de que el rendimiento de la moto esté a la altura de la estética. De nada sirve tener una moto muy bonita si no funciona como debe.
Hemos jugado con la electricidad para poder modificar el comportamiento del motor. Asimismo, se han instalado mandos y luces más modernas que mejoran la visibilidad y facilitan la conducción. La parte eléctrica también ha sido totalmente renovada y mejorada.
En cuanto al escape, hemos montado un silencioso artesanal con cinta anti calórica en todo el colector. Cuando hablamos de silenciosos artesanales, mucha gente se asusta pensando en que tendrán problemas con la ITV. Cuando hablamos de silenciosos artesanales nos referimos a que pedimos a una empresa certificada que los fabrique con determinadas medidas, pero están totalmente homologados.
Como toque de la casa, hemos añadido un depósito Benelli realizado en aluminio. Nosotros estamos encantados con el resultado del proyecto; al igual que su dueño, que está disfrutando más que un niño con un juguete nuevo.
